Esta es una palabra de muy nueva data en
nuestro dialecto, y tal como su nombre lo indica se le endilga a quienes
guardan puestos en alguna cola, pero que además cobran por esa acción. El hecho
no se limita a hacérselo a terceros sino vender el lugar que por diversas
razones ha obtenido, en muchos casos con la complicidad del que distribuye o expende
el servicio. Esto se cmercializa a otra persona por una suma acordada
posteriormente. Es una práctica que se ha puesto de moda en
los tiempos de crisis que se viven en la región y el país y que demuestra no
solo el ingenio para obtener dinero en alguna acción sino también lo
inescrupuloso de muchas personas que no les importa la ilegalidad del negocio. “Me
estoy bandiando como guardapuesto, aprovechando que mi primo trabaja en una
bomba”
No hay comentarios:
Publicar un comentario