lunes, 30 de enero de 2023

La Primera ciudad capital de la Provincia de Maracaibo


 

Ñarra

Esta palabra es de muy vieja data en nuestro dialecto y ya es muy raro escucharla con la connotación que se usaba que en nada tiene parecido a la que leemos en los diccionarios y es usual en otros países como por ejemplo el peyorativo de pequeño en Colombia, Ecuador y Perú, porción escasa en República Dominicana,  persona egoísta o tacaña en Honduras o mocos secos en la zona de León en España. En la Maracaibo de antaño se le endosaba esta palabra a la ganancia que alguien obtenía en su trabajo por aplicar sobreprecio a alguna mercancía en venta,  aunque igual se le señalaba a las propinas que los clientes le daban o algún extra que no estuviera sujeto al salario o pago normal. “Mi abuelo cargaba bultos en el puerto y se ganaba más en ñarras que en lo que le pagaban por el trabajo” 

sábado, 28 de enero de 2023

La Plaza Baralt

Llamado el corazón de la ciudad este es uno de los lugares con más historia de la misma. En época colonial el agua llegaba a las orillas del convento de San Francisco, construido entre 1669 y 1730 y posteriormente cuando la zona fue rellenada se transformó en el mercado a cielo abierto  de la ciudad y se le llamaba La Plazuela y los frentes de la iglesia se le llamaban Plaza de San Francisco. En 1881 se constituye la sociedad Baralt quienes son los responsables de la estatua de Bronce colocada en las intersecciones de la calle 97, llamada en esa época Bolívar con la avenida Colón, eso aconteció 24 de octubre de 1888, en el marco del Centenario del nacimiento de Rafael Urdaneta destacándose los faroles y el pedestal de mármol al pie del monumento, dando inicio a la historia de la misma con ese nombre que al final el pueblo extendió para llamar todo el sector que iba desde la plaza hasta el mercado. Fue el sitio de compras y reunión de la ciudad y el asentamiento de las grandes casas comerciales, lugares para el esparcimiento, clubes, el primer rascacielos, punto de encuentro de los tranvías de las líneas Los Haticos y El Milagro, el Hotel Victoria, el mercado principal entre otros. Allí se celebraba  el paseo inaugural de las fiestas de Carnaval, eran instalados juegos de cucañas, palos y cochinos ensebados, enmochilados y diversidad de Juegos y también se realizaban los actos conmemorativos al centenario del 19 de abril de 1810. Hasta 1973 época en que se inicia la remodelación del centro de la ciudad todo convergía en ese lugar. Con la creación del Mercado Las Pulgas sumado al incendio del Mercado Principal  y a la demolición de La Marina y Los buchones, la actividad comercial intentó ser trasladada y se eliminó el sector como punto de paso vehicular trasnformadolo en un boulevard, que fue culminado en 1998. Sin embargo, el comercio informal siguió haciendo vida a sus alrededores. Este sector posee una rica impronta arquitectónica histórica, en el mismo está el Convento, el edificio de la Botica Nueva, el primer rascacielos con sus dos atlantes bautizados por los maracuchos sansones, otrora casa de Rafael Urdaneta y del Marqués de Perija, el edificio Las Mercedes, donde funcionó el Club Alianza luego que fusionaran los clubes Unión y Concordia, El Blue Book, donde funcionó la Standard Oil Company y posteriormente un famoso restaurant, La casa de los balcones como llaman al edificio de Comercial Quintero del siglo 19, El edificio casa Mcgregor donde en su esquina se podía leer las noticias del mundo en una pizarra y que albergó la primera bomba de gasolina,  los edificios Beco de finales de siglo 18 sede de la firma comercial Blohm & cía y Tito Abbo, de mediados del 20, El hotel Victoria y el Mercado Principal hoy Centro de Arte Lía Bermudez. El lugar fue declarado “Zona de interés turístico” en 2013 y desde ese instante se ha comenzado una larga remodelación que aun hasta la fecha, (abril 2017) no se ha culminado. Sin embargo es quizás el sitio mas obligado para propios y extraños para visitar.


jueves, 26 de enero de 2023

Inocente de:

 

Esta expresión es de vieja data en nuestro dialecto y aun se usa, de hecho aparece reseñada desde el finales del siglo 19 y no posee el significado que le da la Real Academia de persona  que está libre de culpa o pecado o en su defecto que no tiene malicia, mala intención o picardía, aunque hay cierta asociación. Nosotros lo usamos como forma de expresar que no tenemos noticias o somos ignorantes de algún hecho ocurrido o por ocurrir, en resumen como forma de justificación ante el desconocimiento de algo. Se considera un barbarismo pero es algo común el que usemos palabras en contextos diferentes. “Estaba inocente de la muerte de tu padre” “Llegamos inocentes de lo caro que era todo aquí”  

martes, 24 de enero de 2023

Biblioteca María Calcaño

 

Este es el hogar de los libros en la ciudad, funciona en un moderno edificio de dos plantas, ubicado en la avenida el Milagro, entre la Plaza Ana Maria Campos y la entrada a la Vereda del Lago, diseñado por Ernesto Nones e inaugurado en el 2007 donde además de diversos servicios se encuentra el Acervo Histórico del Estado. La estructura está formada por dos edificios separados por un patio interior techado y unidos por una escalera y un pasillo elevado, un amplio frente con pisos de baldosas, dado que el edificio está más alto que el nivel de la calle se entra allí por unas escaleras de 4 escalones, en la parte izquierda hay una rampa para discapacitados y un espacio para estacionar bicicletas, en la parte derecha un espejo de agua rectangular y en la puerta principal un espacio techado, también hay algunos árboles. Desde 1995 funcionaba en el lugar pero en un galpón no apto para las condiciones que necesitaba por lo que fue cerrada en el 2001 y 2002 y trasladado mobiliario y materiales al Irdez primeramente y luego al edificio de la Secretaría de Cultura. Es en el 2004 cuando nace FUNDABIPEZ con la tarea de rescatar el patrimonio bibliográfico y documental y se inicia la construcción del edificio que sería llamado “Biblioteca Pública del Zulia” eliminándole el nombre de la poetisa que había sido colocado en 1995 hasta que el mismo es recuperado en 20012 con el cambio del gobierno regional, quien también realiza cambios profundos en la metodología de funcionamiento de la misma. El lugar entre sus servicios y espacios posee: caseta de información ubicada al entrar donde el personal responde las dudas de los visitantes, Sala de Referencia, usada para las consultas rápidas y la búsqueda de información básica o elemental, Igualmente, tiene el Catálogo Público en Línea disponible para acceder a información más profunda en otras áreas.  Sala General de Lectura, con 250 puestos de lectura y 44 de computación y la disponibilidad de más de 50 mil textos para consulta. La Sala Infantil, con 102 puestos de lectura y 14 de computación, para que la población infantil y juvenil realice investigaciones para sus tareas escolares. Sala Braille equipada con tecnología de avanzada y adaptada para personas con discapacidad visual. Sala de conferencias para la realización de foros, charlas, exposiciones y otras actividades, equipada con video beam y con capacidad para 70 personas sentadas.  Sala Digital con 50 estaciones de trabajo, está destinada a prestar servicios de acceso al computador e Internet, así como consultas de información general y para impartir cursos. Fonoteca y videoteca que funciona como sala de usos múltiples audiovisual, en la misma hay LP, CD. VHS, Casette, DVD, además de una colección de ms de 20 mil LP y dos tocadiscos para colocarlos. También hay un cafetín, oficinas, un amplio patio interior y un extenso estacionamiento. Todas sus salas hacen honor a personajes culturales regionales como David Belloso Rosell, María Calcaño, Amenodoro Urdaneta, Miguel Ángel Jusayú, Hesnor Rivera, Humberto Fernández Moran, Ulises Acosta y Manuel Trujillo Duran.

viernes, 20 de enero de 2023

El Palacio de los cóndores

 

Este edificio es la sede del gobierno regional, fue construido entre 1841 y 1868, siendo inaugurada la primera parte el 23 de abril de ese año por Jorge Sutherland, presidente de la Provincia de Maracaibo, quien otorgó tres días de fiesta por tan magno evento, acaecido el día de San Jorge. Antes en ese lugar y en otras edificaciones funcionaron la cárcel de la colonia y la casa municipal. Fue diseñado por Don Manuel de Arocha y planos del teniente de ingenieros Olegario Meneses. La segunda parte la concluyó en 1890 el general Manuel Ayala.

En 1927 se realizó la remodelación más importante del edificio que es la que permanece hoy, esta fue ordenada por el general Vicencio Pérez Soto. Se modificó el frente y se le colocaron en los extremos del barandal del techo los dos cóndores que tienen posición de levantar vuelo, y que la gente en un primer momento confundió con águilas por lo que era llamado el Palacio de las águilas. También fue reconstruido y decorado el jardín interior que se llamó el Patio de los Leones, donde una fuente situada en el centro estaba compuesta de dos leones de cuyas bocas salía un chorro de agua; se remplazó al escalera de madera y mampostería que comunicaba las partes baja y alta por una de granito. Se colocó en la cornisa superior estampado en alto relieve el lema político "Viva Gómez y adelante” junto a la fecha de reinauguración que fue el 19 de diciembre de 1927. Esta sería quitada a la caída del dictador.

A través de los años ha tenido mantenimiento y reparaciones, entre ellas la sustitución de los cóndores de yeso por unos de fibra de vidrio el 12 de marzo de 1981. Su estilo arquitectónico es Neoclásico, sus espacios se organizan en forma de U, en dos niveles y una escalera central ubicada en el patio anterior. En la fachada principal destaca un balcón corrido delimitado por columnatas y barandas metálicas que se repiten en el nivel inferior. Ésta culmina con una cornisa a modo de balaustrada y un frontón con un escudo en el centro.

Fue declarado Monumento Histórico Nacional el 7 febrero de 1986. Está ubicado en la calle 95 frente a la Plaza Bolívar entre las calles 4 y 5, entre los edificios del Palacio Legislativo y la Casa de la Capitulación.

jueves, 19 de enero de 2023

Edificio de la Alcaldía de Maracaibo

 

Ubicado en la calle ciencias con la avenida 4, frente a la plaza Bolívar, la construcción actual con características modernas fue diseñada por el arquitecto Miguel Casas Armengol, proyectada por la Oficina Arquitectónica de Maracaibo y construida por la empresa Ingenieros Contratistas en el año 1956. Es un edificio rectangular de siete pisos, con fachada de líneas simples, remates superiores de cristal continuo y techo de estructura plegada. En su momento marcó pauta en el desarrollo urbanístico de la ciudad y se construyó como sede del Consejo Municipal. Antes en el terreno estuvo el Cine Alcázar, el Hotel Europa y el Palacio Municipal. La primera construcción que estuvo en el terreno del último fue edificada por María Mancebo Zuloaga y servía como residencia de los gobernadores de provincia.  Razón por la que popularmente se le decía la casa del gobernador, luego fue Casa Consitorial donde tenía sede el Ayuntamiento, posteriormente fue llamada Casa Miyares ya que allí vivía el gobernador de ese apellido. Fue confiscada en la Independencia y en ella se llevó a cabo el pronunciamiento de Maracaibo el 28 de enero de 1821. Cambió su nombre por el de Casa Municipal hasta 1863 cuando es expropiada por Venancio Pulgar  y se colocan allí los tribunales de justicia. En 1889 es adquirida por el gobierno regional y el 21 de julio de 1928 es inaugurada la nueva edificación por el gobernador Vicencio Pérez Soto y se le llama Palacio Municipal, nombre con el que aún muchos lo conocen a pesar de haber desaparecido y dado paso a la actual edificación. Los rasgos originales del edificio fueron alterados, modificando el piso inferior, donde se encuentra el Museo de Artes Gráficas “Luis Chacón” y cerrando gran parte del edificio con paneles de vidrio, manteniendo el acceso a través de una escalinata que conduce al interior y se distribuye hacia los pasillos y escaleras por las que se llega a los niveles superiores, donde se ubican las oficinas administrativas. Es un lugar con un flujo elevado de personas, tanto visitantes como trabajadores y transeúntes.

martes, 17 de enero de 2023

El Lido

Ubicado en la entrada de que en otros tiempos se llamó el vecindario de la Pomona, este nombre nace señalando un cine fundado en la década de 1960 por un inmigrante italiano proveniente de la ciudad del mismo nombre cuyo nombre es Alessandro Pasini, quien encargó a Guido Fresh, habitante del sector la tarea de su construcción. Era la época en que estos espacios eran las delicias de los maracaiberos y su propietario igual lo era del Internacional y otro en Cabimas.

El lugar estaba dividido en dos espacios, uno preferencial y otro llamado patio, en el primero había techo y en el segundo no, algo común en otros espacios similares de ese entonces. Desde un primer momento nació no solo como espacio para películas sino también para presentaciones teatrales en vivo por lo que su nombre era Cine, Teatro Lido. De hecho en su inauguración se presentaron Mario Suarez y Lila Morillo. Con el tiempo y el éxito el mismo se cerró completamente y pasó a ser un punto referencial en la zona y posteriormente de la ciudad. De tal manera que el nombre pasó a identificar no solo el local sino también el conglomerado de viviendas que lo rodean. La estructura después de 50 años sigue en pie ejerciendo otros menesteres y con remodelaciones y cambios que no hacen olvidar su vieja fachada, pero si no fuera el caso igualmente estaría en el imaginario popular ya que con el mismo no se nombra a la sala de espectáculo sino al lugar y alrededores de donde estuvo en la intersección de la calle 102 con avenida 19. “Mi hermana vive por el Lido” “Te metéis por el Lido y allí preguntáis por el que reapra frenos””

Plaza Centenario

Está ubicada en el sector el Transito en la esquina de la calle 96 con la avenida 15A Ricaurte, fue inaugurada  el 24 de agosto de 1945 por Jesús Enrique Lossada, quien era presidente del Consejo Municipal de la ciudad y quien ordenó hacerla para conmemorar el centenario de la muerte de Rafael Urdaneta, por lo que fue colocado en el centro de la misma un monumento representando una torre en cuya altura estaba el número 100 en latín  inclinado, razón por la cual popularmente muchos la conocían como la del gallito, por la similitud del numero con esta golosina, también en los años 60 y comienzos de los 70 le decían la plaza de los muertos. Dado que el lugar era ocupado por el viejo cementerio de la ciudad, los restos de los cadáveres fueron exhumados y trasladados al cementerio el cuadrado. Tras quedar por muchos años abandonada fue recuperada y reinaugurada en el 2006 por el entonces alcalde Di Martino, colocándole pisos, iluminación, bancos, cancha deportiva techada, maquinas para ejercicios, una fuente  en forma triangular con una escultura de la Inmaculada Concepción con manto azul, bohíos y otras cosas más, pero fue nuevamente abandonada y desvalijada, siendo recuperada parcialmente en 2016. Es poco visitada dada su situación y al lado de la misma se encuentra el Centro de Diagnóstico Integral (CDI) Santa Rosalía, el Registro Civil de la parroquia Chiquinquirá y la tienda de cambuleto. Tiene 200 metros de largo por 100 de ancho.

 


lunes, 16 de enero de 2023

Iglesia San Felipe Neri

 

Se comenzó a construir en 1806 en un terreno propiedad de María Josefa de la Colina quien tenía allí una casona de enea y barro llamada “la tenería”, a la cual el agua le llegaba a la orilla, por José Simón Peña quien sirvió de arquitecto y financista de la obra, por ser devoto del santo a quien se le construyó el templo. Pero no fue hasta 1935 diez años después de haberla cedido a los jesuitas quienes continuaron con la obra de Peña, quien murió antes, que se termina esta. El santo patrón fue traído desde España en barco y el acto de apertura se realizó el 26 de mayo de 1835 por con la bendición del presbítero José de Jesús Romero, quien ofició esa primera eucaristía y era sacerdote de la parroquia San Juan de Dios. En 1875 un terremoto con epicentro en Cúcuta destruyó parte del templo y sus instalaciones fueron tomadas para otros fines. En 1910 se intentó infructuosamente tomarla como Panteón Regional y en 1919 Don Manuel Belloso compró la edificación y el terreno circundante y lo donó a la Diócesis de Maracaibo quien la reconstruyó con la ayuda de los feligreses y lo reabrió en 1922 con una misa oficiada por el monseñor Sergio Godoy, tercer obispo del Zulia. En 1925 un grupo de Jesuitas pertenecientes a la Compañía de Jesús se encargó de la custodia y administración del templo y construyeron su vivienda al lado de esta. En 1960  es declarada por la Junta Nacional Protectora y Conservadora del Patrimonio Histórico y Artístico de la Nación como Monumento Nacional pero una década después fue extrañamente expropiada para la remodelación del Casco Urbano y fue abandonada. En 1974 fue cedida como comodato a LUZ para crear un centro cultural pero nunca se llevó a efecto por su mal estado. Sin embargo el Centro Rafael Urdaneta restauró en 1994 parte de la estructura y no pudo continuar con el resto, en 2005 intentaron seguir lo antes no concluido contando con el apoyo de inversión de entes privados reparándose toda la infraestructura pero se quedaron sin presupuesto para continuarlo y esperan en el 2017 poder contar con los recursos para terminarla y tomarla como Sala de Conciertos. La estructura es de tres naves con columnas de mampostería que poseen una puerta en cada una  y es de forma rectangular, con techo a dos aguas, el presbiterio está cubierto por una cúpula. Tiene estilo combinado con elementos neoclásicos y barrocos. Está ubicado en la avenida 11 con la calle 99 Comercio y en su larga historia fue asiento de la primera Academia de Música de la ciudad, así como también en 1949 sirvió como sede de una escuela de niños pobres, también estuvieron allí escuelas de Teatro, Pintura, Sastrería y Fotografía entre otras. Es una de las obras de mayor belleza arquitectónica de la ciudad a pesar de su abandono y fue una de las 2 iglesias que se encontraban en el barrio El Saladillo.

sábado, 14 de enero de 2023

Cepillados El Manguito

 

Este es un lugar tradicional de la ciudad, donde los visitantes pueden encontrar no solo cepillados para calmar el calor sino también chicha, horchata, y dulcería local y nacional. Ubicado en la calle 61 (Av. Universidad) entre las avenidas 4 (Bella Vista) y 3F, al lado de la Iglesia Las Mercedes y fundado por Osman Fuenmayor a quien apodan “El tigre” el 1 de enero de 1966, mantuvo una sana rivalidad por muchos años con otro negocio similar y también ya tradicional llamado “El Raspadito” que estaba en la misma calle. Entre la variedad de sabores de sus cepillados están los de uva, piña, ron pasas, mora, limón, colita, melón, níspero, vainilla, durazno, parchita, chocolate y tamarindo y los mixtos de parchita con tamarindo, con piña y con durazno, así como una combinación de vainilla con limón. Además también destacan entre sus ofertas las tizanas, los helados, y las primeras nombradas chicha y horchata. Igualmente las palmeritas, polvorosas, el calabazate y las conservas de leche y de maduro entre otros. El eslogan que le dio popularidad en los medios “Si no habéis ido al manguito no conocéis Maracaibo” sigue vigente satisfaciendo el gusto de quienes lo visitan. 

viernes, 13 de enero de 2023

Chácharo

Esta palabra ya está en desuso en nuestro dialecto, ya que para lo que se señalaba ya no existe, la misma era endilgada a los vigilantes de civil que estaban en la antigua cárcel de Maracaibo y el nombre es producto del hecho que con la misma se conoce en otras regiones al báquiro silvestre y en la nuestra al cochino de monte pero no por algún parecido con estos animales sino porque en nuestro dialecto se le dice así a las personas que son ágiles, sagaces y tienen conocimiento de lo que hace. Estos vigilantes manejaban una amplia cantidad de informaciones referente a los presos y a los procesos que se le seguirían, por lo que eran buscados por amigos e interesados, el nombre se mantuvo aun después de los gobiernos de Cipriano Castro y Juan Vicente Gómez para quienes estos eran milicianos con disciplina militar. La palabra es asimilada y aunque la connotación es similar tiene sus diferencias“Mi abuelo estuvo trabajando de chácharo por un tiempo en la cárcel”

lunes, 9 de enero de 2023

Hato Grano de oro


Este lugar ya desaparecido le dio nombre al Aeropuerto de Maracaibo mientras estuvo allí entre los años 1929 hasta 1969, en el entonces sector La Macandona del Municipio Chiquinquirá, el mismo, unos afirman que no se vendió el total de la propiedad, fue adquirido por el gobierno a José Oliva  y para el momento de la compra era patrimonio de José María Camarillo.

Se han tejido varias hipótesis acerca del nombre del mismo, una de ellas cuenta que el tataranieto de apellido Castillo del primigenio propietario expresó en alguna oportunidad que el mismo deriva del hecho que su descendiente compró un toro de raza de color negro en España al cual le colocó un anillo de oro en la nariz poniéndole como nombre Grano de Oro y que los ganaderos que llevaban sus vacas en lugar de decir que iban al Hato, el cual según este tenía otro nombre, mencionaban el nombre del semental y esto se hizo popular.

Otra un poco más romántica dice que el ranchero dueño del lugar era aficionado a la música mexicana, tal vez era descendiente de ese país, y admiraba a Pancho Villa por lo que le puso el nombre de su propiedad similar al del caballo de este revolucionario.

Hay una tercera que parece ser la más cercana a la realidad y es el hecho que en el mencionado lugar habían sembrados muchos árboles de dividive y el mismo da un fruto que es muy apreciado en la industria del curtido del cuero, el cual consiste en una vaina corta, ligeramente ancha y amarilla la cual llamaban Grano de oro, en cuyo interior hay semillas que se procesan para su uso en la industria del cuero como tanino, sustancia que transforma las pieles animales en cueros. Según fuentes ligadas a esta industria el dueño del hato incursionó en el negocio de exportación del grano de oro hacia Curazao y Hamburgo, al igual que fue proveedor de Gustavo Zingg y a eso debe el hecho de su cuantiosa fortuna particular. El grano de oro fue un negocio muy lucrativo entre los años 1875 y 1935 para quienes incursionaron en el mismo en el Estado Falcón y Maracaibo y la historia del mismo puede leerse en muchos libros de ese entonces y en reseñas hechas posteriormente, entre ellas la del libro de la profesora Blanca de Lima titulado “Exportaciones corianas: el grano de oro (1875-1935)”

Se desconoce el apellido del hombre que fundó el hato, aunque muchos sostienen que el mismo era Camarillo.

 


sábado, 7 de enero de 2023

Morrongo (a)

Si bien esta palabra según el diccionario de la Real Academia es sinónimo de gato y proviene de la onomatopeya del maullido de este al ser acariciado y en otras regiones representa a una persona que oculta sus malas intenciones, e incluso al órgano sexual femenino, en el dialecto maracucho se usa para señalar la raza de gallos y gallinas que poseen el cuello completamente desnudo sin plumas, otros le señalan como criollos o criollas y también con el nombre de gallipavos. Según los criadores de estas las mismas ponen huevos más grandes que otras razas de estas aves. “Un amigo me regaló unas morrongas para mi gallo que está solo”

jueves, 5 de enero de 2023

Escuyuntao

Con esta palabra se identificaba en nuestro dialecto otra de las dolencias que sufrieron nuestros abuelos y antepasados en la Provincia de Maracaibo, la misma estaba signada por un fuerte dolor en las articulaciones producto de diversas circunstancias, algunas de ellas no conocidas en ese momento, como inflamación, elevación del ácido úrico, artritis, problemas virales  y otros, además de producirse por mala posición al dormir, sentarse o caminar, no es similar a descoyuntar ya que este es un mal mayor en el cual consiste en la dislocación o desencaje de algún hueso. Proviene del hecho que en ese entonces a las articulaciones se les llamaba coyunturas, aún es posible escuchar el término en pueblos del estado y los andinos. “Estoy escuyuntao, no puedo caminar”

miércoles, 4 de enero de 2023

Encuerdao

 

Con esta palabra se definía en nuestro dialecto una dolencia muy común en otros tiempos y también ahora, la misma no tiene que ver con cuerdas de reloj ni con personas furiosas o enojadas que es la connotación que se le da en República Dominicana, tampoco es una derivación de encordar que significa colocar cuerdas a los instrumentos de música, en nuestra ciudad y en otras regiones de la Provincia de Maracaibo se le usaba para señalar el hecho de que alguien tuviera dolores en el cuello producto de dormir o estar mucho tiempo en una misma posición, medicamente se le llama torticolis. El nombre proviene del hecho que a los tendones se les llamaba cuerdas y se le atribuía esta dolencia equivocadamente a la contracción de estos y no la de los músculos como correctamente es. Ya es raro escucharla en la connotación descrita anteriormente y es autoctona fue sustituida en el habla popular por garrotillo. “Me desperté todo encuerdao, no puedo voltiar para ninguna parte”