Esta es una
expresión común en nuestro dialecto, con la misma se señala la lluvia
torrencial que cae y que en muchas ocasiones va acompañada de tormenta eléctrica.
Debe el calificativo al hecho que según la misma hay tanta cantidad de agua que
los sapos se ahogan, algo más jocoso que real ya que esto no ocurre, pero existía
una vieja creencia que este animal no sabía nadar y de allí tal vez se
desprenda la expresión. Es autóctona. “Cayó
un aguacero mata sapos y la casa se inundó”
No hay comentarios:
Publicar un comentario