Nada tiene que ver la boca del batracio con esta palabra que se usa también como apodo en la región aunque si el hecho que al mismo es difícil hacerlo callar cuando croa, de allí viene que a la gente que le cuente a los demás secretos de otro le endilguen el nombre de este animal y la variación entre esto y el apodo del que hago mención es que la persona que se le endilga no necesariamente cuenta secretos sino que tiene una verborrea intensa, o sea habla mucho y dice lo que es y no es. La palabra es una contracción fonética de boca de sapo. “El boquesapo de Santiago no le da una palomita a nadie, solo habla él”
domingo, 24 de febrero de 2013
viernes, 22 de febrero de 2013
Congorocho
Esta palabra no es autóctona, es asimilada, y con la misma se conoce una especie de ciempiés que era común en los jardines húmedos, este al ser tocado se enrolla formando una bola para protegerse, los españoles los llaman cochinilla. Aún existen aunque por las características de la ciudad ya no es tan común verlos. Figurativamente se le endilga en nuestro dialecto este apodo o adjetivo a las personas introvertidas, como una alusión a estar enrollados en sí mismo. “El matero de la mata de cucaracha estaba lleno de congorochos” “Al congorocho de Goyo hay que sacarle las palabras con pinzas”
jueves, 21 de febrero de 2013
Bajar la marea
Esta es una expresión que suele ser común en las zonas costeras que siempre están en contacto con el mar, por lo que es cotidiana en nuestro dialecto y asimilada en su significado de esperar que las cosas se tranquilicen, pero más local en cuanto a tomarla como adverbio de cantidad para indicar que hay pocas personas en algún lugar, lo contrario o antónimo es estar la marea alta. El hecho de usarlas figurativamente no indican que no se usen en su significado literal, el cual indica el alza o bajada del mar o algún cuerpo de agua. “Cuando baje la marea regreso a comprar los pastelitos”
Macuquina - Macaco
Esta palabra ya no se escucha ni en su forma literal o figurativa, no es autóctona del dialecto sino asimilada y se le llamó así a las primeras monedas acuñadas de forma manual en el siglo XVI traídas por la compañía Guipuzcoana. Eran piezas de plata de forma irregular que provenían de México, Lima o Potosí. Su nombre es una deformación fonética de la palabra quechua macay cuna, nombre que daban los indígenas que las hacían en Potosí a la acción de golpear el metal para obtener monedas compactas. También le decían popularmente Macaco, como una forma de expresar su fealdad. Por lo que era común la expresión “Estáis macacúo”.
miércoles, 20 de febrero de 2013
Claridoso (sa)
Esta palabra era muy común en nuestra forma de hablar, aunque ha ido desapareciendo, hay quienes piensan que es asimilada del hermano país colombiano, lo cierto es que la misma sirve para señalar que la persona es sincera, no tiene pelos en la lengua y sus verdades no son atenuadas. Es el efecto de hablar claramente. “Mi abuela era muy claridosa con todo el mundo”
miércoles, 13 de febrero de 2013
Cabra
Esta palabra señala a un mamífero rumiante domestico cuya cría en nuestro país se hace desde tiempos precolombinos. Nuestro dialecto tomó esta palabra para señalar el hecho de hacer una picardía en el popular juego de dominó que consiste colocar una piedra incorrecta sin que los otros lo noten, por lo que con el transcurrir de los años se ha generalizado su uso como sinónimo de engaño y se ha usado en esta connotación. Tiene su génesis en los campos en los cuales se comercializaban animales pequeños de ovejas para la cría y dada sus características a esa edad algunos metían cabras entre el lote de las mismas. También se usa figurativamente para señalar una persona obediente, casi siempre en sentido burlesco. “Me metiste una cabra con los plátanos” “Eso que tocan Uds. es una cabra gaitera” “José es una cabra, va para donde le diga la mujer”
Mamblea
Este era el apodo de Manuel Prieto, saladillero que junto a su compañero Carlos Bernal, conocido como Roñoquero, fueron tildados de los embusteros más grandes del mundo por los fieles oyentes de sus chistes en la época. Este par de caballeros usaban su ingenio para ganarse cervezas a cambio de contar historias que además de estrambóticas poseían la natural jocosidad local, por lo cual los maracaiberos usan el apodo del primero señalado para endilgárselo a alguien que en compañía de otro sea considerado embustero. “Sois un mamblea”
Keko
Esta palabra ya es poco usada, la misma se le endilgaba a las personas que se veían desalentadas, alicaídas o tristes y tiene su génesis en las peleas de gallos donde se le llamaba al gallo que no deseaba pelear de ese modo. Según algunas versiones no confirmadas un gallero con ese nombre criaba y ponía a pelear animales que siempre perdían por su poca disposición a pelear y esto motivó a que de manera burlona a los perdedores le colocaran como adjetivo el nombre de este. “Anoche vi keko a Tomás” “Andáis todo keko desde que llegasteis de viaje”
Flichita
A las tapas de refresco en nuestro dialecto se le dice flicha y esta palabra no identifica el diminutivo de ellas sino al popular juego que se realiza, el cual consiste en batear las mismas con algún palo de escoba u otro material. Tradicionalmente se juega entre dos personas, una que batea y otra que picha y ataja, pero también puede jugarse con más. El out se realiza atrapando la flicha antes que toque el suelo o deje de moverse en el piso. “Vamos a jugar flichitas en el frente”
Micropote
Este artefacto de fabricación artesanal se consigue generalmente en la vía falcon-zulia y es ejemplo del ingenio local, el mismo es de forma redonda, en la parte superior se les coloca una tapa, tienen en su interior unas rejillas, cuya función es sostener los alimentos y se usan para calentar comidas sobre las hornillas de la cocina. Es fabricado con latas de potes de leche y en parte de allí deriva el nombre, que es una palabra compuesta que significa micro de microonda y pote de la forma y material hecho. Es de nueva data y es una variedad de los célebres hornitos de lata que se hacían cuando las cocinas eran de kerosén. “Me compre dos micropotes ayer”
Limon de perro
Este curioso nombre que usamos en nuestra región para identificar esta variedad de fruta tiene su razón en el hecho que es el que usamos para curar las enfermedades dérmicas de los perros, como sarna, urticarias, etc. Es de tamaño grande y de pocas semillas y lo picamos por el centro, para luego restregarlo en la piel del animal. Regularmente existen tres tipos de limones en nuestra región, el criollo que es el más pequeño y que tiene poco jugo pero es muy acido, el más grandecito que es jugoso y es el preferido para las comidas y el primeramente nombrado que es menos ácido y lo usamos o comemos poco. “En el patio de Juan hay una mata de limones de perro”
Paraban - Cancel
Esta palabra era usada en el dialecto por nuestros abuelos para definir las armazones verticales de madera u otro material que se usaban para dividir espacios en una habitación, también se les conoce como cancel, nombre original con el que lo conocían los españoles. Actualmente sigue llamándoseles así, aunque se le ha agregado a esas definiciones la de biombos. “Hay que poner un paraban para dividir el cuarto”
Estar volcao
Esta expresión además de señalar el hecho de que algún objeto se encuentre en las condiciones que cita, se usa comúnmente en nuestro dialecto para señalar un estado de ebriedad extremo en el cual el afectado no tiene la capacidad de moverse o levantarse del lugar donde se encuentra. Es una comparación que se hace con el auto que se encuentra con los cauchos al aire. “No me llaméis porque estoy volcao”
martes, 12 de febrero de 2013
Alistranao (á)
Esta palabra ya poco se escucha pero era común en el campo, en la época de la colonia y en nuestra ciudad hace muchos años. Indica la posición diagonal o transversal en la cual se coloca algún objeto. Tiene su génesis en el hecho que los listones de madera en la construcción de las casas se colocaban de esa forma en los techos, con el propósito de darle mayor fuerza al armazón o los travesaños colocados en forma cuadrangular. Igualmente se señalaba así al hecho de ponerse atentos y listos para alguna acción. Ya es muy raro escucharla. “Puse la pala alistranada en la pared” “Estoy alistranado para lo que digas”
Clinche
Esta palabra identifica a los artesanales proyectiles fabricados para ser usados y lanzados con una liga, con la finalidad de causar molestia en el blanco, los mismos generalmente son hechos con papel o cartón, aunque también los hay de metal u otros materiales, y doblados de tal manera que puedan tener un peso suficiente para lograr su objetivo. La liga se coloca entre el pulgar y el índice, simulando una honda y el clinche se lanza estirando esta y soltándola. Era de uso común en las secundarias en los años 60, 70 y 80. Su nombre al parecer es una deformación de la palabra inglesa Clinch que significa abrazar. “Luis me dejó el cuello rojo con el clinche que me pegó”
Rasquipi
Esta es una palabra compuesta y es parte del ingenio local, ya que de engloba con la misma dos sinónimos de una misma palabra, la cual identifica los síntomas de una enfermedad común llamada escabiosis, mejor conocida como sarna. Es usada cuando la misma produce una picazón extrema que hace difícil al enfermo dejar de rascarse, se dice entonces que tiene rasquipi, que es lo mismo que rasquiña con piquiña. Su uso no es tan popular. “Elsa anda con rasquipi”
Arboliá
Esta palabra es oriunda del municipio Miranda y con la misma los nativos de esa región señalan el hecho de que alguien tenga su casa desordenada, tiene su génesis en la comparación que hacen con los terrenos llenos de árboles, los cuales se llenan de hojas de los mismos, por lo cual puede considerarse un sinónimo de desorden.. Su uso es corriente y es una palabra de mediana data en el dialecto. “Tenéis la casa arboliada”
Canario
Con este nombre se conocen los nativos de las islas canarias y también un ave cantora muy común en nuestros campos e igualmente fue el apodo que recibieron los billetes de 500 bs que circularon a finales de los 50 y en los 60. Los mismos eran de color rojo, razón por la cual fueron llamados así en todo el país, por lo que es una palabra asimilada. “Me pagaron con puros canarios”
Bocabierta
Esta palabra en su mayoría de los casos tiene forma despectiva y es una manera de insultar o tildar a una persona de retrasada, tonta, quedada o ingenua. Viene del hecho que generalmente las personas con discapacidades mentales tienden a andar con la boca abierta. Es de uso frecuente y aunque lo correcto sería escribir boca abierta, fonéticamente pierde una a. “Al bocabierta de tu hermano se le perdió el celular” “Por estar de bocabierta se me pasó el bus”
Chique
Esta palabra no tiene significado, algunos piensan que es un aféresis de chico o chica, pero su uso es casi exclusivo de las personas de la etnia guajira, por lo que es una muletilla que los mismos usan corrientemente al conversar, generalmente con alijunas o sea personas que no pertenecen a su raza. “Chique, ¿cuánto cuesta eso?”
Tusa
Aunque el termino se le ha endilgado a la mazorca de maíz seca, no es esta la que lo originó sino el fruto del árbol tipo enredadera llamado Luffa que los españoles usaban para limpiar los trastos y bañar los caballos y ellos mismos. Este es conocido como estropajo y era muy corriente en nuestra región. En su forma fresca se asemeja un pepino, por lo que también servía como alimento, pero al secarse su contextura queda como una esponja. El árbol en nuestro lar tomó el nombre del fruto y con el tiempo ha ido despareciendo, razón por la cual la mazorca ha sustituido esta esponja natural. “Tenéis que bañarte con una tusa para quitarte tanto cicutillo” “Conseguíme una tusa para lavar las pailas”
Tazaito
Esta expresión es propia del municipio Miranda donde se usa frecuentemente con connotación ocasional de reclamo ante la acción. Se le dice así al hecho de hacer comida o alguna otra cosa para repartir o consumir de manera exacta o medida. Viene el nombre de la comparación culinaria de medir por tazas los ingredientes que se le echan cuando se prepara alguna receta. “Mija vos hacéis todo tazaito” “No contéis que va a quedar repele, porque está todo tazaito”
Fuga o Runche
Aunque también de esta forma llamamos un tipo de petaca y a la acción de fugar , es más común llamar a un tradicional juguete, hecho generalmente de forma artesanal con dos flichas aplastadas a la que se les abre dos huecos en el centro y por donde se pasa una cuerda. La cuerda se hace girar y luego se estira haciendo que se enrolle y desenrolle para que el disco de vueltas. Es llamado gurrufío en el resto del país, y el nombre local es onomatopéyico producto del sonido que hace que es “fuuuuu”, también por influencia de los andinos se le dice runche. Eran populares las peleas de fugas o runches en los cuales el ganador era quien cortaba primero la cuerda del otro. “Vamos a pelear fugas” “Voy a hacer un runche”
domingo, 10 de febrero de 2013
Un Micky Maus
Cuando el ratón, llamado resaca en otros lugares, producido por la borrachera del día anterior es muy grande decimos en nuestro dialecto que tenemos un micky maus, como una alusión al famoso ratón de Disney que en Disneylandiay y en espectáculos artísticos que han presentado en la ciudad es representado por personas de elevada estatura. Fonéticamente le cambiamos la o por a y le quitamos la e final a la palabra mouse que en inglés es ratón. “Cargo un micky maus que me va a hacer estallar la cabeza”