Con este nombre se le conoce en nuestro
dialecto un método casero y rudimentario que sirve para aliviar la molestia
ocasionada a los niños por la aparición de nuevos dientes. En décadas anteriores
fue muy popular en la Costa oriental del lago, sobre todo en lo que hoy es el
Municipio Simón Bolívar, tanto es así que está incluido como Patrimonio de la mencionada
región. El mismo consiste en tomar el tallo que se forma entre la planta y el
fruto de la auyama, labrarlo, abrirle un pequeño orificio por donde se le
introduce una cuerda que sirve para colocarle alrededor del cuello del niño a
quien le están saliendo los dientes. Este al sentir la comezón producida por
esto se lleva a la boca el mencionado tallito y la calma. La aparición de
productos comerciales para el mismo problema relegó este método que según muchos es herencia indígena, pero
siguió usándose por los estratos sociales, económicamente más bajos. “A fuerza
de tallito me salieron los dientes sin molestarme la picazón”
No hay comentarios:
Publicar un comentario