Además del instrumento de cuerdas que lleva este nombre, en nuestro dialecto existe una definición que nada tiene que ver con el mismo. Se le llama así al mal olor que proviene de las axilas o sobaco, producto de la no utilización de desodorante o algo similar. Al parecer el término se adopta ya que este hedor es más penetrante cuando la persona alza el brazo y el instrumento se toca con estos levantados a cierta altura. “ese portugués siempre anda violinúo”
No hay comentarios:
Publicar un comentario