Con este nombre se conoce en nuestro dialecto a una galleta
tradicional venezolana, hecha a base azúcar y manteca, a la que se le agrega una
porción de harina de trigo de todo uso, al igual que porciones mínimas de canela
molida y sal y posteriormente horneadas. El resultado es una galleta que se derrite en
la boca por su alto contenido dulce y que adquiere cierta dureza gracias a la
harina. Era muy popular en abastos o tiendas y panadería de antaño pero no en
las casas ya que las cocinas eran de gas o kerosen y el horno de las más
grandes no era tan efectivo. Con el tiempo esto cambió y pasó a ser una galleta
casera e igualmente el nombre en el dialecto cedió ante el usado en otras
partes del país que es llamada polvorosa. Mientras que la raíz del nombre en el
dialecto deriva del hecho de ser hechas con manteca, el de otras regiones
señala el hecho que su textura frágil al ser metidas en la boca se vuelve
polvo, aunque en ambos casos también hay que destacar que las monjas venidas de
España trajeron una galleta hecha con grasa de cerdo, sobre todo en navidades, llamadas
polvorones o mantecados y se presume que de allí derivó esta, quien cambió la
grasa de cerdo por manteca vegetal, pero mantuvo los otros ingredientes en porciones
diferentes., “Cómprame 2 mantecadas en la tienda”