En nuestro
dialecto se define así al que vende helados caminando en la calle en los
carritos, es una palabra que nació en el génesis de esta forma de negocio en la
ciudad a cargo de heladería el Polo, la cual fue fundada a finales de los años
30 y terminó dándole el nombre genérico a los helados que vendía. Sigue siendo
una palabra popular a pesar del paso del tiempo. También se le dice así, por
comparación, al que recorre largas
distancias caminando, ya sea por gusto propio o por cuestiones de trabajo, estudio
o necesidad. "Voy a esperar al polero" "Mi abuelo trabajaba
de polero" "Vos si sois polero, lo que te gusta caminar es
jaiba"
miércoles, 28 de julio de 2010
Polito
Los helados
caseros hechos de jugo de frutas normalmente se congelaban en cubetas, las
cuales dividían su contenido en cuadritos, a estos se les daba el nombre en
nuestro dialecto de politos y muchos los comercializaban en sus hogares, tal
vez exista una relación de estos como diminutivo de los polos, pero como
siempre también se usa la palabra para la mantequilla que viene en barras la
cual pedimos de esta manera: “Vendéme un polito de mantequilla” "Mi
abuela vendía unos politos de mango que eran muy sabrosos"
Polo
Los helados
de paleta tienen un nombre regional muy peculiar, se les llama polos y al
parecer esto es a consecuencia de que los primeros helados de este tipo
fabricados en la ciudad y comercializados en carritos los hizo una fábrica cuyo
nombre era Fabrica o Helados El Polo, el termino sin embargo se generalizó para
todo tipo de helado y aunque ahora no es tan usado se mantiene como expresión
de nuestro dialecto. Igualmente a los trayectos
largos se les da ese nombre y es natural oír decir cuando alguien debe caminar
mucho "Que molleja de polo te vais a echar", al parecer hay
una relación entre lo arduo de la caminata del heladero con su carrito y el uso
de esta palabra. "Vendéme un polo de vasito"